El micrómetro es una herramienta para
tomar mediciones más precisas, que las que pueden hacerse con el calibre.
El micrómetro se basa en el principio del tornillo-tuerca. Normalmente, por cada vuelta que damos al micrómetro, este avanza medio milímetro. Con los topes cerrados el micrómetro indica el 0. Según los vayamos abriendo, la abertura existente entre ellos quedará indicada en la regla graduada cilíndrica. Dispone también de un tambor graduado que nos indica las fracciones de vuelta. Este tambor consta, por lo general, de 50 divisiones.
Las partes de un micrómetro son las siguientes:
La sensibilidad o apreciación del micrómetro se obtiene de la misma forma que en el calibre. Si este se encuentra dividido en n partes iguales (suele dividirse en 50), podemos apreciar el paso de rosca h (medio milímetro) dividido en n veces.
La apreciación del micrómetro será:
A = h/n = 0,5 mm / 50 = 0,01 mm
Cómo se usa:
Para medir, se coloca la pieza entre los topes, girando el tambor de fricción que arrastra el tornillo principal. Una vez que los dos topes toquen la pieza, el tornillo no avanza más.
Tomamos nota de la medida marcada por la regla cilíndrica, que mide hasta los medios milímetros. Después añadimos la parte decimal (si la hubiera) del siguiente modo:
• Leemos en el tambor la división que coincide con la línea de graduación de la tuerca (fracción de vuelta dada).
• Multiplicamos este número por la equivalencia (0,01 mm) hallada arriba y añadimos el resultado a la parte medida directamente.
medida del objeto = parte entera + fracción decimal
Veamos un ejemplo de lectura:
medida = K + R A
medida = 11 mm + (9 x 0,01) mm = 1 mm + 0,09 mm = 11,09 mm
Podemos Verás en el siguiente enlace, como se realizan las medidas con el micrómetro.